martes, 24 de diciembre de 2019

Regalo de Navidad 2019

Entre mis reseñas he hablado sobre los efectos nocivos del cristianismo y las buenas consciencias reaccionaron empujando la pregunta de por qué lo hago. No había considerado la posibilidad de que alguien me lo preguntará y contestaré lo mejor que pueda. Evidentemente, este texto es perfectible y tus cuestionamientos me ayudarán a pulirlo

Algunos antecedentes personales.
Mi madre ha rezado toda su vida y mi padre tiene un Dios a su manera que trata como si fuera su amigo. Estoy bautizado e hice mi primera comunión cuando cursaba la secundaria. Hace más de 40 años, una vecina me regaló una Biblia para niños que leí una y otra vez. Sus historias me parecían muy interesantes. David y Goliat, Sansón y Dalila, Abraham dispuesto a matar a su hijo, etc. Estudié la preparatoria en una escuela del Opus Dei. En esa institución se encargaron de explicar con detalle toda la doctrina cristiana, la vida de Jesús, los sacramentos y el Apocalipsis. Durante los tres años de preparatoria tuve una clase de religión igual que tú tuviste la de matemáticas o la de letras hispánicas. Es decir, había exámenes y podías reprobar. En cada aula había una imagen religiosa, se rezaba el Ángelus a las doce del día y podías confesarte los jueves.
A nadie en mi salón le interesaban las clases de religión pero yo era el extranjero incómodo que preguntaba y pedía explicaciones. Era un adolescente que creía en Cristo. La mayor parte de mis compañeros había recibido esa instrucción desde el jardín de niños, así que eran capaces de escuchar sin poner atención. Yo no. Además había algo muy molesto en mi pasado, yo había tomado el catecismo y nada de toda esta maraña me habían platicado. No sé por qué la iglesia de mi colonia ocultaba información indispensable.

Muchas de las preguntas que realizaba llegaban al punto en que la única respuesta era: Eso es un misterio. Había muchos misterios y algunos eran tan obvios que tenían nombre, los llamaban misterios para evitar decir dogmas o para no decir que era algo cuya explicación era imposible, de modo que debías creer sin hacer preguntas. Si seguías preguntando te acusaban de haber perdido la fe. Perdí la fe pero gané la verdad. Gracias a la información que recibí y analicé, noté que fuera de allí, la gente no sabía gran cosa. Nadie sabía quién era Aristoteles ni Tomás de Aquino, ni cuáles eran sus aportaciones al cristianismo, ni qué carajos eran los concilios, ni habían escuchado sobre la infalibidad del Papa. Pocas personas saben qué son las indulgencias o dónde se adquieren. Eso no importa, las buenas consciencias son capaces de pagar con gusto una estafa tan descarada y evidente como esa. No les interesa entender y eso no perjudica su sentimiento de buen cristiano.

Mientras crecía, Carol Wojtyla, a quién conocían como Juan Pablo II, era importante y visitó México, la gente lo idolatraba. Nunca entendí por qué. Sólo algunos sabían que era un hombre polaco que viajaba por el mundo para hacer crecer el número de creyentes y así recuperar los ingresos que la Iglesia estaba perdiendo. Los católicos son felices con ir a ver pasar el papamóvil e incluso dicen que se sintieron renovados por ver la nuca del viejo en turno.

El punto es que conociendo la estructura del catolicismo y sus mitos, me decepcioné por completo de la Iglesia. Quién quiera saber más sobre la historia de esa institución puede leer "La puta de Babilonia" del colombiano Fernando Vallejo. Si quieres una lectura más recreativa puedes conseguir el "Malleus Maleficarum". También puedes leer casi cualquier libro de historia europea para entender porque hay una Iglesia Anglicana y una Iglesia Ortodoxa Rusa.

Después de investigar un poco, cualquiera entiende que las iglesias son un negocio que tiene la gracia de no pagar impuestos. Que los bancos nacieron con ellas y que los gobiernos les perdonan los impuestos a todas, sean católicas, evangélicas o adventistas del séptimo día. Pero el cristianismo no es sólo iglesias, dinero y sacerdotes.

Las fuentes del Cristianismo
Si ya investigaste y leíste el antiguo y el nuevo testamento, ya te diste cuenta de que existen muchos libros y que cada libro tiene un estilo peculiar. Nadie en su sano juicio puede afirmar que todos estos libros fueron escritos por Dios, menos aun por Cristo o que no existen contradicciones entre los textos. De hecho, nadie niega que el dios del antiguo testamento es un viejo rabioso aficionado a la carne asada y la barbacoa y que el dios del nuevo testamento tiene una vibra mucho más relajada. ¿Son dos dioses? ¿Es un caso de bipolaridad? Nada de eso. Es un solo dios con un nuevo pacto. Pero para empezar, algunos libros hacen mención directa de su autor humano, los evangelios por ejemplo. Hay gente que dice que todos los libros fueron escritos por personas que recibieron inspiración divina. Si comparas los textos, notarás que el inspirador tenía  ideas extrañas y muy contradictorias. 

Hay controversias más sencillas de aclarar. Por ejemplo: Aunque existen varias versiones de la biblia, fueron humanos quienes decidieron qué libros la integrarían y revisaron las palabras que forman cada texto. Es decir, hubo alguien que decidió que ciertos evangelios fueran considerados apócrifos y que quitó o puso palabras en cada versión. Pero quizá creas que ellos también contaron con inspiración divina. No tiene caso discutir algo tan difícil de probar.

Olvidemos los libros y vayamos sólo a los mandamientos que se supone bajaron del cielo ya escritos y fueron entregados a Moisés. Ni siquiera es necesario discutir las versiones que conocemos de los mismos. Imagina por un instante que intentas vivir tu vida conforme a ellos. Si vas por allí sin mentir y amando a Dios sobre todas las cosas; te puedo ver muerto o en un manicomio. ¿Crees que exagero? Inténtalo una semana, pero ponte serio y no comiences a interpretar las palabras de dios para que se acomoden a tus actos.

No seamos tan estrictos, olvidemos los mandamientos y concéntrate en el más importante del cristianismo: amar a otros. Sabes que la prostitución está mal vista y las personas que se dedican a ese oficio son extorsionadas, intenta ayudarlas. O quizá puedas amar a un violador o a un asesino. Bueno, más fácil, a tu vecino el de las fiestas hasta las tres de la mañana cada sábado o al que estaciona su coche delante de tu puerta. Ser cristiano es difícil. No te rindas. Entra al templo para sacar a los comerciantes, rodeado de ladrones y prostitutas, explicando a todos que deben renunciar a las riquezas. No creo que logres muchos adeptos pero tendrás nuevos enemigos.

Ya ni siquiera es necesario vivir conforme a los diez mandamientos para darse cuenta de lo absurdo que resulta el cristianismo y su hipocresía. ¿Alguna vez has averiguado si Jesús nació el 25 de diciembre? ¿Sabes cómo fue crucificado? ¿Conoces los documentos que prueban la existencia de Cristo? ¿Sabes cómo determinan la semana santa cada año? Podrías intentar descubrir este tipo de curiosidades y también compararlas con mitos de otras religiones más antiguas que el cristianismo. ¿Conoces el mito del Rey del Bosque? Apóyate en el libro "La Rama Dorada" de James George Frazer y consulta todas las fuentes que creas necesarias. Lo que encontrarás será un montón de coincidencias y explicaciones astronómicas. Pero no creas una sola palabra de lo que yo escribo. Compruébalo. Después de hacer este recorrido podrás afirmar sin miedo que Cristo nunca existió.

La esencia del cristianismo
Puede ser que tu fe sea tan fuerte que sigas creyendo en Cristo aunque hayas comprobado que nunca existió. Yo creo en Dios y no tengo pruebas de su existencia. Tu quizá crees en que si te portas bien resucitarás en el cielo. No me importa cómo llegaste a esa conclusión. Haz este ejercicio conmigo. Imagina que eres Dios, que conoces todos los actos de cada uno de los humanos y te diviertes con ellos. ¿Los castigarías? ¿Qué beneficio puede obtener Dios de premiar o castigar acciones humanas? La respuesta más simple es decir que no podemos conocer la voluntad de Dios. Es curioso que Cristo tome apariencia humana y castigue actos humanos, podría optar por tomar forma de vaca y castigar actos vacunos. O crear unos seres superiores a nosotros. ¿De verdad crees que estamos hechos a imagen y semejanza de dios? ¿En tan poco estimas su poder? Incluso Stan Lee pudo imaginar seres mejores que los humanos. 

Los daños reales del Cristianismo

Independientemente de que Cristo nunca existió y que el mito se ha ido puliendo durante siglos gracias las Iglesias y sus luchas por el negocio. Debes reconocer que la sola imagen del Cristo caucásico, aunque históricamente incorrecta, produce una serie de males. Es decir, no se trata de que la compasión o amar a los otros sea malo. Se trata de que el hombre destruye todo lo que toca y los buenos principios o ideas que puede tener el cristianismo han sido torcidos por el hombre para utilizarse como base de muchos males. Es fácil pensar que los humanos somos seres inteligentes y que no reaccionamos tan simplonamente, pero no es verdad. Los seres humanos difícilmente podemos llamarnos inteligentes, quizá seamos mañosos o prácticos, pero inteligentes no. Ningún ser inteligente estaría discutiendo sobre destruir su entorno natural. Si fuéramos inteligentes habría paz en el mundo y nadie creería en Cristo. Todos se hubieran preguntado de dónde salió un mito tan elaborado y hubiera sido desechado por ser un collage que se sostiene con alfileres de mala calidad. Pero volviendo al tema, las pestes que el humano ha cimentado en el cristianismo incluyen a la guerra, no hablaré sobre ella por ser demasiado evidente. Me concentraré en los males cotidianos que sufres todos los días que son difíciles de diferenciar porque todos están íntimamente relacionados.

HIPOCRESÍA
Cuando yo era niño iba al Templo y allí hasta el vecino más odioso te daba la mano. Saliendo de misa, afuera, era otro cantar: podías matarte a pedradas. Sin embargo, dentro, todo debía ser armonía. Nunca entendí este asunto, la Iglesia debería ser un sitio para arreglar desacuerdos reales, desde que no cortas las yerba de la jardinera hasta que no recojes el excremento de tu perro. Allí debía de hablarse de cosas reales y no de historias literarias y seres mitológicos. Para mí la Iglesia es pura hipocresía es como saber que tu tía siempre pide sus sobras para la perra, pero no tiene un can en su casa. ¿Por qué la mentira? Acostumbrarse a ella es parte del sistema. Del mismo modo en que no se debe cuestionar si Jesucristo nació de una mujer virgen, o cómo alguien puede saber eso o cuál es la razón o la necesidad para que así fuera.

MACHISMO
Si Dios es hombre, los hombres deducen que son superiores. ¿Cómo llegamos a esta maravillosa conclusión? Del mismo modo en que pensamos que si alguien usa sotana es una buena persona y no quiere violar a los niños. Las mujeres deben someterse a la voluntad de los hombres porque si dios nos hizo a su imagen y semejanza, los hombres estamos un paso más cerca de la divinidad que las mujeres. Cristo tuvo madre, pero no fue mujer. Y esa tontería ha hecho la diferencia durante siglos. ¿Por qué Dios no nació mujer y salió completo de la cabeza de su padre? El cerebro humano no da para más y no pregunta lo que no le conviene. ¿Quizá haya algún tratado teológico que justifica porque Dios encarnó en Jesús y no en Jesusa, pero sinceramente no creo que algún sacerdote se haya hecho esa pregunta. Ese simple detalle se transforma en un montón de actitudes imbéciles que van desde pensar que la mujer es un objeto que sirve para la reproducción hasta mantener la prostitución bajo control masculino. Pero estoy seguro de que se te ocurren mil más cómo la violencia domestica o los feminicidios.

SOBREPOBLACIÓN
El cristianismo ha creado una idea de la familia nuclear que tiende a reforzar prejuicios. Ser gay es malo porque no aporta a la reproducción. Rompes el natural uso biológico de tu cuerpo. Ser gay es contra natura y por tanto ningún gay debe ser parte de la Iglesia. Claro que los gays han hecho versiones muy divertidas sobre Cristo y sus apóstoles viviendo como una  comuna gay. Pero ese prejuicio no es el más idiota. El más grave de todos es el rechazo a los métodos de control natal que llaman no naturales. Es decir, puedes usar la abstinencia o el método del ritmo pero no la píldora del día siguiente. Todo porque debes tener los hijos que dios te mande. Esto degenera en niños no deseados y en marchas para mantener el aborto criminalizado. No lo digo yo, lo puedes leer en los diarios. Pero lo peor de esta actitud es que siembra en las personas un deseo inconsciente de tener hijos y pareja sin nunca saber cuál es la satisfacción que obtendrá de ellos. Evidentemente después de tener hijos todos dicen que son lo máximo y presionan a otros para que cometan la misma tontería que ellos cometieron. Atarse a un trabajo para mantener a una cría insatisfecha que nunca pidió nacer.

RACISMO 
Del mismo modo en que Jesús no fue Jesusa, la representación del Cristo fue blanca y no negra, ni amarilla ni café. Eso lleva a la mayoría de la gente a pensar que por tener la piel de un color más semejante a la iconografía son superiores. El resto, los tostados, los amarillos y los negros no fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios y por eso valemos menos y podemos ser explotados o eliminados. ¿Qué pasaría si Cristo hubiera sido una mujer negra o una china? ¿Cambiaría eso nuestra percepción sobre las razas y sobre las mujeres? Muero de curiosidad.

HOMOGENEIZACIÓN
Todos deben creer en Cristo, la absurda evangelización de pueblos en Africa, Asia y América destruye otras culturas y credos. Así como los españoles y los portugueses impusieron su lengua para dominar los pueblos americanos, así también se escudaron en la religión para realizar la conquista y barrer los dioses nativos o mezclarlos con sus santos. El objetivo siempre ha sido la homogeneización de la gente. Lo mismo sucede con la televisión o con el teléfono celular. Todos deben tener uno.

RADICALIZACIÓN Y SECTAS
Los cristianos no escapan de la radicalización. Otros cultos son malos, los musulmanes son terroristas, la santería es satánica o los naguales hacen brujería, por eso es necesario acabar con ellos. Sólo los protestantes tenemos la razón, los católicos adoran santos, son politeístas. División y conflicto, estrategia política para evitar que la sociedad actúe en conjunto. La única lectura correcta de la Biblia es la mía, la única versión correcta es la que yo apruebo. ¿En serio? Pues sí, así funciona el negocio. Estas conmigo o contra mí. Perdón, pero esta conducta no es aceptable ni en un niño de primaria. Es necesario aprender a tener desacuerdos y hablar sobre ellos sin llegara a los insultos. Todos deberíamos aprender a sustentar nuestras ideas y a reconocer que muchas de nuestras certidumbres carecen de respaldo y, lo más importante, reconocer y aceptar públicamente cuando nos equivocamos.

CENSURA
Todo modo de vida distinto al mío es malo o miserable, no debo verlo, no debo contaminarme. Todas las realidades que no se apegan a mis principios o a mis mandamientos son malignas y por eso mandaron varios idiotas a sembrar el Cristianismo en Japón dónde nunca les hizo falta para vivir felices. Hay personas que exigen un dios para generar un ética, lo cierto es que la ética no depende de los dioses y sus caprichosos antecedentes. Los humanos pueden generar un comportamiento ético basado en algo tan simple como la seguridad y el bienestar.

AMANSAMIENTO 
El cristianismo tiene una larga tradición de jerarquías. Las jerarquías sirven para evitar preguntas incómodas. Jesús eligió a Pedro, no a Juan ni a Matías. Pedro fue el líder por designio divino y dios no se equivoca. Si Pedro fue tocado por dios, seguramente sabe más y es mejor persona aunque lo haya negado tres veces. Así nadie cuestiona ciertas cosas que son dogmas ni nadie cuestiona políticas que son avaladas por la voluntad particular envuelta en autoridad. Si a ello sumas que cuando seas abofeteado debes poner la otra mejilla, ya que dios es el único que hará justicia, lo que logras es lavar el cerebro de los débiles para evitar su venganza. Si eres bueno, serás recompensado en el cielo. Mientras tanto, te tocó ser jodido y no repeles. ¿Quién puede creer esto?

AUSENCIA DE CUESTIONAMIENTOS
La religión tiene muchos asuntos inexplicables que se aceptan como verdades incuestionables. Esa lógica de confiar en la palabra sea verbal o escrita genera personas que tienden a respetar la autoridad sin cuestionar su lógica. Ya no se trata de un asunto de bienestar, es un asunto de control. Yo mando, tú obedeces. Así las cosas son más fáciles, más simples, más efectivas y me benefician más. Ni se te ocurra golpear o matar eso es pecado mortal y te irás directo al infierno. Bueno, quizá te salves si antes de morir te confiesas y te dan la absolución. ¿Nada de esto te parece absurdo?

SEXO REPRIMIDO, ENFERMEDAD Y PEDOFILIA

Nada hay que decir, que no haya sido dicho antes. Basta ver el lío que enfrenta Bergoglio con Maciel y su herencia maldita. Pero puedes bajar de nivel y enterarte de cuántos hijos tiene el cura de tu parroquia o qué se ganó en la rifa navideña del prostíbulo. Pero insisto, no me creas, investiga.

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